La paciencia del marionetista

El grupo “Marionetas en Libertad” –ganador de la Beca Creación 2018 del FNA- lleva a los lugares más recónditos de la provincia de Córdoba su milenario arte.

Con tenacidad, hilo por hilo, sólo el marionetista es capaz de acomodar cada una de las cuerdas del muñeco, de sus tuercas, de sus trucos, en un proceso que puede durar hasta tres horas antes de cada función.

Así, el artista se vuelve en un engranaje esencial de la máquina que mantiene vivo el arte ancestral de las marionetas de hilo. “Si bien esta disciplina tiene gran repercusión en países del este como Polonia, donde se ha desarrollado como tradición cultural, en nuestro país los marionetistas somos contados con los dedos de una mano por la complejidad del trabajo mecánico y de las estructuras a desarrollar”, explica Jenny Van Lerberghe, una de las integrantes del grupo “Marionetas en Libertad”, ganador de la Beca Creación 2018 del FNA.

El grupo obtuvo la ayuda para montar su obra “Llave Mágica” que conjuga teatro, escenografías animadas, marionetas, danza y música en vivo, con un relato que reflexiona sobre la evolución, el progreso y la búsqueda del bien común. El guion está inspirado en el antiguo escrito de Kybalion, base de la alquimia y la filosofía.

Para la producción de esta obra, Marionetas en Libertad -que ya tiene más de 30 años de historia- convocó a dos artistas aún no iniciados en la disciplina para garantizar la transmisión efectiva de lo recorrido y, a la vez, actualizar este arte incluyendo a las nuevas tendencias que los jóvenes artistas aportan. Así se estableció un encuentro entre la milenaria y artesanal disciplina de la marioneta de hilo, con la tecnología y las posibilidades de la animación 3d, por ejemplo.

“Llave Mágica” se estrenó el año pasado en el Teatro "Viva Falucho!" en la ciudad de Capilla del Monte, Córdoba, a sala llena. “La reacción e interacción con los asistentes fue maravillosa. Niños y adultos quedaron fascinados por igual, frente a una historia narrada a través de los objetos, de actores y de escenografías animadas”, recuerda Jenny.

“Si bien todos los artistas integrantes de nuestras puestas, llevan un estilo de vida más bien austero y propio del interior del país nuestras producciones son costosas y de larga duración. Una producción promedio puede significar un ciclo de 2 años desde su concepción hasta el estreno, y se ven involucrados más de diez artistas, entre comunicadores, productores, pintores, carpinteros, escenógrafos, vestuaristas, compositores musicales, coreógrafos, manipuladores, actores y técnicos”, explica la becaria.

Actualmente, el grupo está de gira con la obra por escuelas primarias, jardines y otros espacios de la provincia de Córdoba y están preparando un festival de Teatro de objetos en Capilla del Monte para las vacaciones de invierno y dos giras por Villa María y Buenos Aires. Además, la compañía participa de Festivales Internacionales.

“Generamos una rueda de producción que transforma la realidad de nuestra comunidad y de sus artistas, tanto para quienes participan de nuestras puestas como para los que se ven inspirados por nuestra forma de producción y concreción de proyectos. La rueda se completa con el público, y dentro de nuestra planificación, siempre está el foco puesto en llegar a los lugares más recónditos y vulnerables del país”.

“Sabemos positivamente que un espectador debe entregarse al ejercicio de la concentración y contemplación.- alecciona Jenny- Difundir este tipo de práctica, similar a la lectura de un libro, fortalece al pensamiento y establece una posibilidad lúdica de replantearse la vida tal como la percibimos”. 

login